En la mañana de El Megáfono dialogamos con el alcalde de Barros Blancos, Braian Ferri, para conocer más detalles sobre el operativo de tránsito que se llevó adelante este martes desde las 17:00 y que se extendió hasta entrada la noche en distintos puntos del municipio. La intervención incluyó controles simultáneos y presencia policial reforzada.
Ferri explicó que la medida no surgió de un día para el otro, sino que fue resultado de semanas de reclamos y advertencias de los vecinos y también de inquietudes planteadas desde el propio municipio. “Ayer se dio una serie de operativos en diferentes puntos; veníamos recibiendo comentarios, observaciones y preocupaciones de la gente, y también las teníamos nosotros”, señaló.
“Puede ser antipático, pero la gente está pidiendo seguridad”
El alcalde reconoció que los controles —y en especial las multas— generan molestia en parte de la población. Sin embargo, sostuvo que la responsabilidad de la gestión exige actuar cuando el problema afecta la seguridad de todos.
“Sé que a veces suena antipático y uno queda como el malo de la película, pero cuando escuchás a las personas que piden seguridad entendés que es necesario”, expresó. Según detalló, los vecinos han insistido en la peligrosidad que representan:
• Motos de alta cilindrada circulando a gran velocidad.
• Conductores realizando wheelies o maniobras extremas en calles internas.
• Carreras picadas, primero en Ruta 8 y ahora dentro del barrio.
• Hechos delictivos asociados a este tipo de movimientos, que generan aún más sensación de inseguridad.
Ferri agregó que muchas mujeres le han manifestado el miedo que sienten al regresar de noche del trabajo o al caminar solas por determinadas zonas. “Hay vecinos que casi tienen que tirarse a la cuneta porque pasan motos a alta velocidad. Otros te cuentan que ya sufrieron rapiñas. Eso también empuja a tomar decisiones”, dijo.
Reclamos reiterados en cabildos y reuniones barriales
Según el alcalde, la demanda surgió claramente desde el propio barrio. En los cabildos y en encuentros barriales, los vecinos expusieron repetidamente la necesidad de actuar. Incluso recientemente convocaron a una reunión con autoridades policiales, a la que también invitaron al municipio.
“En esa reunión quedaron claras las preocupaciones. No solo había picadas en Ruta 8: ahora se habían trasladado a calles internas, y había familias que habían sufrido rapiñas vinculadas a estas situaciones”, relató Ferri.
Ante esa realidad, agregó, las autoridades “no podían mirar para el costado”.
Tras coordinar con la Dirección de Tránsito y con la Policía, se definió implementar una serie de operativos, siendo el de este lunes el primero.
¿Continuarán los controles?
La duda que más circuló entre los vecinos es si se trató de una acción aislada o si estos controles se repetirán. Ferri fue claro: habrá más operativos.
“Esta fue la primera intervención, pero la idea es que se repitan. No sé si es la solución definitiva, pero sí puede disminuir el problema y dar una señal de respaldo a quienes piden más seguridad”, aseguró.
Con estas medidas, el municipio busca fortalecer la convivencia y la seguridad vial, atendiendo de forma directa a una preocupación que se volvió central en la vida cotidiana de Barros Blancos.
